jueves, 15 de julio de 2010

El éxito televisivo de una comunidad de vecinos

Aquí os dejo la colaboración de un amigo sobre la serie 'La que se avecina', la "continuación" de la famosa 'Aquí no hay quien viva'. Series de televisión sobre la vida en la comunidad de vecinos. Muy apropiada para estos periodos de la emancipación en los que empiezas a poner cara a tus vecinos y a convivir o a malvivir con ellos... Tengo que reconocer que no he seguido la serie pero la crítica de Rico me ha dejado con las ganas. Un post muy interesante para cuando tengáis unos minutos libres.


"La que se avecina: tan descabellado como en la vida real", por Rico (a.k.a Miguel del Pozo)

Es evidente que el "todo vale con tal de conseguir audiencia" es uno de los pilares fundamentales de casi todas las cadenas de televisión, pero en el caso de Telecinco forma el esqueleto entero desde su nacimiento. Hace veinte años eran las bailarinas con poca ropa (que nos animaron la más tierna infancia a algunos de nosotros) y los primeros "realities" los que formaban la mayor parte de la programación, luego siguieron por la rama de los "realities" a la vez que apostaron por dotar a la cadena de buenos informativos (no debió de dar buenos resultados, porque rápidamente volvieron a darle bombo a los sucesos y a los reportajes sensacionalistas de "investigación"), y actualmente parece una televisión destinada a las marujas, aunque también están intentando pillar un trozo del pastel deportivo, principalmente fútbol, pero también han adquirido los derechos del mundial de motociclismo para próximas temporadas.

El modo de conseguir ideas o caras nuevas para incorporar a la parrilla tiene semejanzas, salvando las distancias, al del Real Madrid: poca imaginación y mucho dinero. Si una presentadora tiene éxito en otra cadena, pues a intentar ficharla, y si se pone a tiro, directamente el programa entero. Algo así es lo que ocurrió con "Aquí no hay quien viva", serie que triunfó en Antena 3 durante bastantes temporadas, y que acabó con un "final abierto" pocos meses después de que se anunciase que Telecinco se había hecho con el "pack completo" de actores para reproducir la idea.

"Aquí no hay quien viva" era una serie que me gustaba bastante, una especie de "13, Rue del Percebe" de carne y hueso, dinámica y sencilla, sin pretender otra cosa que hacer pasar un buen rato al espectador. Telecinco la reprodujo como "La que se avecina", cambiando tanto la situación (de un edificio céntrico antiguo pasó a una urbanización de nueva construcción en las afueras) como el rol de los protagonistas, que eran casi los mismos que antes, pero interpretando papeles diferentes. Al principio no le presté ni la más mínima atención, quizá porque olía a refrito, quizá porque el botón "5" del mando a distancia es como el "7" de Telemadrid, que siempre me olvido de pulsarlo al hacer zapping.

Más de un año después de su estreno, por pura casualidad, vi que emitían un capítulo y me puse a verlo. Al principio reconozco que no le encontré demasiada gracia, pero la suficiente para volver a verlo una semana después. Y poco a poco, al ir conociendo a los personajes e incluso a identificarme con algunos de ellos, me fue enganchando, hasta el punto de tirar de "Series Yonkis" para ver todos los que me había perdido por mi indiferencia inicial hacia esta serie. Aunque parezca difícil, Telecinco por primera vez había conseguido comprar un buen producto y no estropearlo, sino mejorarlo aún más.

En la serie todos tienen un papel muy característico, lo que sería un "personaje" con todas las letras. No creo que el realismo sea una de las pretensiones de los guionistas, pero en una sociedad tan absurda como la nuestra, te das cuenta de que dichos personajes tan exageradamente estereotipados existen en casi cualquier comunidad de vecinos. Un presidente de comunidad intolerante y ridículamente retrógrado pero que a su vez se va de putas en cuanto surge la más mínima ocasión, un concejal de segundo nivel con una vida llena de desgracias porque decidió ser honrado y dialogante, un prejubilado que prefiere ver partidos de la liga turca de fútbol por televisión que salir de paseo con su mujer, una pareja de recién casados a los que sus suegras no les dejan vivir realmente independizados, unas jubiladas que entraron de okupas y acabaron consiguiendo el piso gratis, un matrimonio feliz y con hijos roto por los cuernos y la crisis, unas jóvenes atractivas que empiezan a tener problemas para ligar justo cuando buscan una pareja estable antes de que se les pase el arroz, un portero que parece tonto pero que se pasa el día fumando porros y tirándose a la devota mujer del presidente en su caravana sin que éste se entere... en fin, personajes que se complementan y chocan de tal manera que las historias den mucho juego. Quizá una de las claves del éxito resida en ser una serie coral, en la que todos y a la vez nadie tienen el papel protagonista.

En resumen, "independizarse" es una palabra que suena muy bien, pero al hacerlo no hay que olvidar que es muy probable que los nuevos vecinos pasarán a ser parte indirecta de nuestra nueva familia, bien sea por la naturaleza cotilla del ser humano, o porque los muros de papel de fumar hagan que el polvo que están echando los del piso de al lado suene tan cerca que te recuerde a los ruidos que escuchabas con diez años cuando te levantabas a mear en mitad de la noche. Ah, y si llevarse mal con un vecino no es nada conveniente porque te puede hacer la vida imposible, también hay que saber elegir con quién tienes un trato más cercano, porque puede acabar metiéndose en tu vida sin que tú quieras.

No hay comentarios: