Siguiendo con el hilo de la entrada del miércoles, he dado con la mesa perfecta para los juegos de mesa...
Muy adecuada, sobre todo, para una partidita de poker con tus amigos más ludópatas (como la que me voy a perder esta noche por estudiar).
Además, aunque nunca ha sido fácil hacer un castillo de cartas (en mi caso, imposible. Tengo un pulso como para robar panderetas...), no tenéis de qué preocuparos. En este caso, las cartas diseñadas por Mauricio Arruda soportan más de 200 kilos de peso, ya que se trata de pequeñas planchas de acero de 4 mm.
¿La única pega? El cristal... Muy estético, pero el reflejo puede ser una gran ayuda para los tramposos.
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