No pisaba el piso desde la inauguración y me sirvió para ver cómo había quedado tras las reformas...
¡Vaya cambio!. De verlo lleno de pintadas y sin apenas muebles a encontrarme con una casa completamente preparada. He decidido subirlo al blog ahora que tengo tiempo, tras los exámenes, porque merece la pena. A mí me han dado alguna idea que quizás aplique en un futuro próximo... Además, ya les pediré alguna colaboración, como expertos que son, para el 'Estudio de la Emancipación'.
El piso tenía posibilidades. Me encantan los pisos de dos alturas, con las escaleras, un salón amplísimo, techos abovedados en la parte superior...
En cualquier caso, quedó incluso mejor de lo que me imaginaba. Lo más impresionante, la pared de ladrillo y el juego de luces por toda la casa:
Acabo dando las gracias a ambos anfitriones por la invitación y por entrar en el elenco de emancipados (aunque sois demasiado apañaos con todo).
2 comentarios:
Siempre miro tu blog ...y , sin embargo, esta entrada se me habia pasado.
Se ve guay la casa...Muchas gracias.
Un besazo
La casa es una pasada! ¿Cómo se va a ver? jeje. Un besazo.
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